Yo también tengo derecho
Este lugar huele muy mal. No me atrevo a moverme, y durante todo el tiempo solo quiero hacerme pequeño en una esquina, muy pequeño, como si no estuviera. Los dos patas del cajón con ruedas me tiraron aquí, ellos debieron de creer que con cuidado, pero me hicieron daño. Son humanos, hombres y mujeres, y se llaman con nombres parecidos …