Profecía

Ráfagas de destrucción, oleadas de delirio, alaridos que no trascenderán. Una opacidad brotará de los intersticios de la Tierra, engullirá las existencias y apagará los hálitos. El tiempo colapsará, y su ofrenda postrera, la que concederá el privilegio de perdurar, descenderá a los pies de las elegidas.

Las madres falsificarán los certificados de nacimiento, pero será inútil. El tiempo lo sabe todo, y solo las hijas nacidas durante la súper luna de esta noche sobrevivirán, aquellas que nazcan cuando los relojes atómicos marquen el período exacto en que el satélite salga y se ponga.

En medio del caos, nadie advirtió la falacia, el burdo engaño del oráculo. La Humanidad está condenada. La profecía excluyó a los varones.

Autor: Marta Estrada Galán
Dicen que algunos niños nacen con un pan bajo el brazo. Yo asomé al mundo con un libro y un cuaderno, solo que no me enteré hasta que a los once años comencé a devorar novelas y a escribir historias como si no hubiera un ayer en que también podría haberlo hecho. Luego llegó eso que llamamos vida, donde entre lectura y lectura, me convertí en lo que soy: escritora, aficionada a los paseos, a mantenerme en forma, al canto y al radioteatro, integrante de un coro y madre a tiempo total. Convivo con mis dos hijos, mi gata Nara y mis amigos que, aunque en la distancia, siempre están a mi lado.

Deja un comentario

Ir al contenido