A través del tiempo

No estaba muy segura acerca de si debía compartir mis obras infantiles, lo que daba en llamar novelas, y que al menos las primeras, no van más allá de veinte páginas. También los poemas de entonces, así como otros escritos. Muchas personas me lo han pedido. Además, en cuanto a lo primero, sé que hay niños que me leen en compañía de sus padres.

Con cierto rubor accedo a ir colgando mis pequeñas creaciones literarias desde que comencé a guardarlas con trece años. Y pensad que los textos no están corregidos, aparecen tal cual los escribí, fieles y vírgenes.

El motivo de por qué la decisión de hacerlo en una página y no como entradas del blog es sencillo: quienes accedáis aquí es por interés o curiosidad, no es necesario que los lectores del día a día que gustan de seguir el blog se encuentren con creaciones más largas y desfasadas.

Que lo paséis bien.

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